Croquis muy esquemático de las dos fases, o más bien dos acueductos sucesivos, de Itálica. La conducción más antigua venía de los manantiales inmediatos al río Guadiamar hasta la vetus urbs. Cuando en los primeros decenios del siglo II se acomete la ampliación de la ciudad, o nova urbs, se construye un nuevo canal, que capta sus aguas más lejos, de la zona de Ituci (Tejada la Nueva), acoplándose en la cañada de Conti al antiguo, del que se separa nuevamente en las proximidades de Itálica para enfilar la zona más alta próxima al nuevo anfiteatro, con nuevos castella o depósitos, aquae y divisorium.